Por Salvador Hernández Landeros.
Bastó publicar la preocupación por la salud del líder de la Sección 50, para
que la sede sindical se invadiera de “falconiformes”, vulgo, buitres o zopilotes.
La indignación no se hizo esperar entre los maestros estatales de esa agrupación,
para que se manifestaran en contra de la ambición de varios ex dirigentes.
En la Sección 50 del SNTE de NL, señalan, hay grupos que aspiran al poder,
entre otros, “El Power Woman”, “La Morena” y “La Potranca de Santa Rita”.
Esos tres grupos son encabezados por dos ex lideresas. Pero también están el de
“Los Ángeles y Demonios” y “Los Chuchos”, éste con dos años en campaña.
El periodo de José Luis López Rojas, dirigente con salud fragmentada por una
cirugía, es del 2017 a marzo del 2021 y podrían convocar a nueva elección.
Yolanda Martínez, quien amadrinó al actual, ahora lo hace con Juan José
Gutiérrez Reynoso, “El Juanjo”, hijo de Juan José Gutiérrez Duarte, “La Rata”.
Virginia Cortés, conocida como “Vicky La Tesorera”, encabeza su grupo
apoyada por Mario Leal Regalado, (a) “El Guarachón”, director en Conalep.
José Ángel Alvarado, cabeza de “Ángeles y Demonios” apadrina a Renato
Ramos, hijo de Valdemar Ramos, cacique de la Normal de Montemorelos.
Mirna Saldívar Paz, pretende imponer a su hermano Gabriel, apoyada por el
delegado de SNTE, Aquiles Cortés, a quien apodan “El Chupes”.
Por último, Jesús “Chuy” Ortiz, quien no está en los “buitres y zopilotes”,
porque anda en campaña desde enero del 2019, es apoyado por Alberto Gómez.
Los maestros están hartos de la imposición nacional y harían lo que hizo el
finado Ernesto Tijerina, tal cual lo narró en su libro, el profe Cruz Cantú.
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