Por Salvador Hernández LANDEROS.
Primera llamada, primera llamada…Una obra de “ilusión y ambición” está por concluir en próximos meses cuando cambien Rector y elijan nuevo director.
Así, como se avisa en un teatro antes de iniciar la función, les avisamos lo que se le viene al director de la Facultad de Ciencias Políticas de la UANL.
Abraham Hernández Paz se subió al aparador público. Está endeudado con cientos de alumnos y padres que invierten en la educación de sus hijos.
Sin información y sin transparencia andan perdidos varios millones de pesos que fueron depositados para un curso que fue suspendido por el Covid-19.
Los alumnos de Ciencias Políticas andan pensando, que los mil pesos que pagaron por dicho curso, el director los pudo utilizar en sus viajes de placer.
Cuentan que Hernández Paz presume sus viajes por diferentes partes del mundo, siempre junto al exdirector de esa Facultad, Gerardo Tamez González.
El evento suspendido y por el cual pidieron mil pesos por estudiante, se llamaba “El Motor de México”, el cual nunca arrancó, pero si se esfumó el dinero.
El viajero internacional tiene que regresar todo lo que ingresó para el curso porque, de acuerdo al presidente de México, el costo lo debe aportar la UANL.
En esa Facultad, hay al menos unos 5 mil alumnos y si todos pagaron mil pesos, pues son cinco millones que ingresaron a Relaciones Internacionales.
Ojalá que Hernández Paz y su eterno acompañante Tamez González, no vayan a salir con que para eso se utilizaron, para las relaciones internacionales.
El tiempo corre y se agota. Viene nuevo Rector. Y si el gobernador no es amigo del ex rector José Antonio González, con Santos, no habrá Paz.
