Por Salvador Hernández LANDEROS.
Cuál es el temor de Samuel García el que Adrián de la Garza sea el Fiscal propuesto por los diputados locales, a los que, incluso, veladamente amenazó.
A través de El Norte les mando decir: “Pero se los digo por las buenas, que repongan (el proceso), escojan al mejor perfil, técnico, no político, y todo podría salir como Dios manda”. (sic)
Cómo se puede interpretar esa advertencia del gobernador, sobre todo el “pero se los digo por las buenas”. Aquí o en China, eso es una velada amenaza.
Además: “Y todo podría salir como Dios manda”. Dios no tiene nada que ver. Los diputados y miembros del comité de selección cumplen con un deber.
Porqué insiste en que Adrián no pasará a la Fiscalía. Dice a los diputados: “Se los digo con todo respeto, no va a pasar, se va a vetar”. (sic)
Hasta pareciera que el gobernador Samuel García estaría siendo víctima de una paranoia que lo lastimaría y reduciría su muy buena intención de gobernar.
El Norte reprodujo sus palabras: “¿Cómo me van a poner a mi rival, que se metió con mi familia, (con) la de Colosio, con los videos, los hackeos…? (sic).
No tiene porqué involucrar a Colosio en un asunto que sólo le compete a él, a los diputados y al comité, que deben seleccionar una terna y otro candidato.
Suponemos que en “los videos”, está con el que se desacreditó a la candidata de Morena, que al final convencieron al elector para no votar por ella y si por él.
O bien el video en una fiesta donde aparece Samuel cuando era un niño. Es subjetivo afirmar que fue hackeo. Pudo ser obra de un “amigo” resentido.
Por qué teme el que Adrián sea Fiscal. Además, porqué lo hace a título personal. Que los diputados hagan lo suyo. El gobernador, con los ciudadanos.
