Por Salvador Hernández LANDEROS.
El alcalde de Santiago, David de la Peña, se pasa de vivo. No tiene dinero para tapar 360 baches, pero el recurso le sobra para promocionar su imagen.
Se cura en salud y culpa al gobierno estatal del abandono a la carretera que lleva a parajes como la “Cola de Caballo”, “Laguna de Sánchez” y otros más.
Según él, “cientos de baches y zonas peligrosas sin barandales de contención ponen en peligro a los paseantes” y echa culpa al Sistema de Caminos de NL.
De la Peña Marroquín asegura que “esa carretera tiene al menos seis años sin recibir un mantenimiento integral por parte del Estado” (sic) ¡Ups!
Se queja del abandono de ese camino, pero se le olvida que el anterior alcalde, priista igual que él, “administró” durante seis años anteriores el municipio.
El ex alcalde Javier Caballero tiene culpa del abandono y actualmente es diputado y preside la Comisión de Seguridad y se fua a Qatar, ¿De a dónde?
Por lo visto es tardadito, conste, tardadito. Se tardó año y medio de su trienio, más la campaña, para “hacer un recorrido para diagnosticar el problema”.
El edil estira la mano y pide al gobierno del Estado que le ponga la atención que requiere esa carretera que es muy transitada por el turismo. ¡Y él, para qué está!
La “Magia” de Santiago, alcanza para sacar de la chistera, no solo “conejitos”, sino también alcaldes que ven más por su imagen y no la del ciudadano.
Nomás para que vean como se las gasta el alcalde, adjuntamos foto de la revista, señal de que para su imagen hay recursos, pero no para tapar los baches.
Ahora, el que Samuel García no tenga capacidad requerida para gobernar un Estado como NL, no es para que se lo agarren de su puerquito. Eso no se vale.
