Por Salvador Hernández LANDEROS.
El alcalde Miguel Treviño va cargar una pesada loza para convencer a los sanpetrinos de que su municipio sigue siendo el más seguro de todo México.
En campaña electoral para alcanzar su reelección, vendió a los ciudadanos un reconocimiento “patito”, de esos que sobre seguridad abundan por el País.
El tiempo y la milagrosa suerte de un habitante de San Pedro, prendieron la alarma de que la seguridad no existe y, que lo que sobra, es ineptitud policial.
Todo lo que diga el secretario de Seguridad de ese dizque municipio modelo, Gerardo Escamilla, no se lo van a creer y la vigilancia privada va a redoblar.
Siete elementos policiacos, incluyendo a una mujer, involucrados con miembros de la delincuencia organizada no son cualquier “minoría”.
Miguel Treviño, como “gato boca arriba” va a defender su administración. Más valdría aceptar la falta de oficio policial de su secretario y buscar un sustituto.
Lo ocurrido en San Pedro va a prender en las corporaciones de seguridad pública en todos los municipios, principalmente, en los del área metropolitana.
No duden de un show policial, de esos que se realizan cada vez que se presenta alguna eventualidad. “Que Fuerza Civil se hará cargo mientras se investiga”.
Aldo Fasci Zuazua, va armar una reunión con las autoridades militares y aplicarán, de nueva cuenta, pruebas de confianza a los policías de San Pedro.
Lo que hicieron los policías que acudieron a auxiliar donde había un daño patrimonial, secuestrar y entregar al afectado a la DO, abrió nuevas formas.
Si de por sí hay desconfianza con los policías, en verdad cree el alcalde que los sanpetrinos, después de estos hechos, ¿van a pedir el auxilio policial?
