El polvo y religión.

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Por los años 90’s, me tocó conocer a un personaje, que había salido de las filas de un influyente medio de comunicación, para brincar a otro.

Gracias a su “currícula”, lo llamaron para producir un programa de los “escándalos” y sucesos policiacos en la entidad, por cierto, duro muy poco al aire.

En una ocasión, estando en su mesa de asignaciones, conversando con sus reporteros, saco de manera brusca su cartera, y salió volando un pequeño sobre, cuyo contenido era un polvo blanco, con las características de eso que ya se imaginan, lo que a este personaje lo puso nervioso y solo atino a decir que era talco, todos se miraron entre sí y le dieron el beneficio de la duda.

Días después de terminada la encomienda en el medio al que había sido convocado, salió del lugar y ya sin empleo, cuentan que comenzó a juntarse en el H. Congreso de Nuevo León, diciendo a los diputados pertenecer al departamento de ventas del sitio del cual había salido.

Los directivos atendieron las quejas de , y se desligaron de cualquier trato con el susodicho, al no pertenecer a la empresa. Después rodó por algunos medios, y luego apareció como vocero en algunas dependencias, dónde hizo muy bien dinero, con fraudes y concesiones, para acogerse en la iglesia y desde ahí, iniciar con un supuesto “activismo social” tomando la bandera de Provida, por la religión de la que ahora es pastor.

Se postuló como candidato en algunos puestos de elección popular, tomando como bandera, oponerse al aborto y estar en favor de la vida, además de tomar la religión como estandarte, por un partido X y perdió.

Los mejores negocios, los ha hecho de en familia, porque curiosamente, sus negocios los maneja junto a sus hermanos y sobrinos, al grado de que han sido secuestrados para obligarlos a pagar algunas deudas con ciertos allegados.

Les seguiremos contando de este personaje…