Por Salvador Hernández LANDEROS.
Lo que era una denuncia contra el cuñado del cuñado del gobernador, escaló otros niveles que involucran a funcionarios, instituciones y organismos.
Lo que inició contra el Registrador de Montemorelos, Luis Gabriel Garza, casado con la hermana del alcalde de Terán, Daniel Sánchez, es un Tsunami.
De inicio se involucró el parentesco familiar del alcalde con su cuñado, Samuel García, pues está matrimoniado con la hermana del gobernador.
Pero luego de dos publicaciones en este espacio, el 23 de abril y el 1 de agosto, se destapó “un drenaje” que involucra al X-2, al SUSPE y puede haber más.
Vamos por partes. En la estructura de la administración estatal, existe el Instituto Registral y Catastral cuyo director es José María Urrutia García.
El Instituto depende del secretario general de Gobierno, Javier Navarro Velasco, quien por cierto representa al gobierno ante el Colegio de Notarios Públicos.
En lo Catastral, no hay problema. El asunto que involucra corrupción es el Registro Público, del cual se hace cargo, Juan Pablo Puente Lemus.
De Puente Lemus, quien antes de llegar a ese cargo, en su camino profesional también fue gestor, es decir, hacía labores de gestoría en una Notaría.
Este no es un impreparado. Conoce bien los entuertos del Registro Público de la Propiedad, lo que se hace y lo que no se hace y, sobre todo, cuánto cobrar.
Quienes hacen labor de gestoría ven en el y sus jefes, una nula participación para evitar la corrupción, con los cobros de consulta y otros servicios.
Lo que está ocurriendo con el Registrador de Montemorelos lo saben y no lo frenan y, el perjudicado, a final de cuentas, será el gobernador Samuel García.
Mañana continúa…
