Por Salvador Hernández LANDEROS.
Para evitar percances viales y que los conductores de vehículos disminuyan la velocidad al circular por ciertas avenidas, la autoridad debe aplicar el ingenio.
Sobre todo, en esta época en la que se padece por las altas temperaturas de calor, principalmente los meses de julio y agosto, agregando la canícula.
A nivel nacional, de acuerdo a las estadísticas en víctimas y daños materiales por percances en las vialidades, los regios somos los peores conductores.
El ser peor es lo de menos, en Nuevo León, lo que abunda es la imbecilidad de muchos conductores y que, compararlos con burros, no es válido insultarlos.
Qué culpa tienen los burros de cuatro patas, cuando que a los de dos, en su raciocinio para nada se les da la precaución de conducir en forma moderada.
En el Área Metropolitana hay zonas donde los vehículos alcanzan hasta los 80 kilómetros, cuando que la máxima permitida, no llega siquiera a los 30 kms.
En San Pedro está la Calzada del Valle, Fundadores, desde Valle Oriente hasta San Agustín. Igual en camino a Chipinque y otras concurridas avenidas.
En Monterrey, San Nicolás, Guadalupe, Villa de Santiago y otros municipios abundan zonas, campos y parques visitados por amantes de caminata o trote.
En esos lugares, la autoridad ha colocado señalamiento preventivo para evitar el atropello de algún caminante, pero a los imbéciles conductores les vale.
A esos cafres no les importan los señalamientos, ni siquiera los que desde hace años se avisa de una Zona Escolar para que conduzcan con Precaución.
Por eso, con ingenio buscar cambiar el sistema. Por ejemplo, escribir ¡Cuidado!… ¡Campo Nudista! y ¡No se Distraiga!, sobre todo, donde el atuendo, no deja nada a la imaginación…