Por Salvador Hernández LANDEROS.
Los maestros de la Sección 50 del SNTE en NL están divididos para el proceso electoral del 6 de junio, pero contra su dirigente, están más que unidos.
Los maestros de ahora no están unidos como antes, todos en el PRI. Según les conviene, ahora están con MORENA, PT, PRD, Nueva Alianza, PAN o RSP.
Durante los cuatro años de la gestión de José Luis López Rosas, dicen, que perdieron lo más valioso para ellos, la devaluación de los servicios médicos.
El despilfarro y la corrupción. La subrogación de los servicios con el Isssteleón y hasta la entrega de medicamentos que actualmente son genéricos.
Existe la escasez de medicinas por parte de los laboratorios proveedores, porque les exigen un 20 o 30 por ciento para la liquidación de sus facturas.
Culpan directamente a la secretaria de Finanzas, Vicky Cortés, además a otros como Isidro Veloz, Candelario Pedroza y Juan José “Juanjo” Gutiérrez.
La Sección 50, aparte de recursos propios generados por las cuotas, recibe para los servicios médicos, $32 millones adicionales, mensualmente, del Estado.
Además de la escasez de las medicinas, está la notoria ausencia del personal médico, muchos de ellos familiares y amigos de algunos ex líderes.
Al gobernador le reclaman que cumpla lo que ofreció. “Otorgar beneficios a los que trabajan por contrato y brindarles el servicio médico”, que nunca llegó.
El expediente contra López Rosas y “achichincles”, así les dicen, es abultado. Amagan con tomar acciones porque su periodo ya se acabó. ¡Ni un día más!
Dicen que, para elegir nuevo dirigente, las reglas cambiaron. No permitirán a los exlíderes, imposiciones de estos, que aún siguen “sangrando” al sindicato.
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