Por Salvador Hernández LANDEROS.
Inician campañas y en Escobedo no habrá novedad, ahí todo seguirá igual. Sólo habrá migración de partido luego de 30 años de caciquismo de Abel Guerra.
Andrés Concepción Mijes Llovera fue registrado como candidato a la alcaldía por MORENA, así que “seguirá la misma gata, pero revolcada”, sin historia.
El candidato renunció al PRI, partido que lo cobijó casi 25 años. Lo dejó, no por inconformidad, sino por su conveniencia e intereses muy “patronales”.
De los 51 municipios de NL, Escobedo será un “pan comido” para MORENA. Es más, se predice que el PRI podría no regresar, al menos, en un sexenio.
Ahora que, en esos terrenos, cualquier candidato gana con solo cargar con una estampita de Abel, ya que él mismo empezó a tejer su control desde 1992.
Mijes Llovera, ingresó al sector oficial de la mano de él. Siempre ha estado a su lado. Él lo formó al igual que a Miguel Ángel Lozano, Alcalde de Pesquería.
El caciquismo que se vive en Escobedo, ha sido el de un líder político que tiene un dominio total de una sociedad que se volvió un clientelismo político.
Por los protocolos sanitarios, para evitar contagios del Covid-19, las campañas políticas habrán de ser muy ingeniosas, pues se evitarán las presenciales.
Escobedo no es lo mismo que San Pedro. En Garza García la gran mayoría de los votantes tiene más acceso a la tecnología para una campaña virtual.
La falta de tecnología en algunos sectores, Mijes la podría sustituir evocando a Abel o Clara Luz, pero ambos andarán ocupados por la gubernatura.
Pero, cuestión de un perifoneo, con el éxito de Los Cadetes de Linares que dice: “No, no te preocupes por mí, aquí todo sigue igual, como cuando estabas tú”.
