Por salvador Hernández LANDEROS.
Una desafortunada descalificación fue la que respaldó el presidente AMLO a
los médicos especialistas, durante una de sus acostumbradas mañaneras.
Ello, durante el anunció de un plan para duplicar el número de lugares para que los médicos puedan especializarse, cuyo costo será de $2 mil 500 millones.
Fue durante la mañanera del pasado jueves cuando se descalificó a los médicos especialistas señalando que, “Ahora las cosas no son como antes” (sic).
En Palacio Nacional, el presidente aclaró que en México no tenemos los
médicos que se requieren y hay que empezar a resolver con soluciones.
Según esto, el recién pasado sábado, se inició el plan con el nuevo examen a médicos de ingreso a la especialización y disminuir su rechazo, “como antes”.
El responsable del Examen Nacional de Residencias Médicas, es el doctor
Alejandro Svarch, quien dijo que se darán plazas-becas en todo el País.
El presidente y Svarch dijeron que “el citado examen contaría con la seguridad de la Secretaría de Marina, la Defensa y de la Guardia Nacional”.
Svarch agregó: “Es importante que los colegas tengan tranquilidad de que este examen es totalmente confiable y libre absolutamente de corrupción” (sic).
Igual recalcó: “El examen está resguardado en instalaciones militares para darle la garantía y con condiciones de que NO VA A SER FILTRADO” (sic).
Y el presidente remató: “Es un nuevo examen y está siendo custodiado por el Ejército, nada de que se venden las respuestas como antes se hacía” ¡Gulp!.
Con el problema del Covid-19 encima y descalificar a los médicos especialistas de esa manera, no se vale. Ahora resulta que son médicos copiones, “balines”.
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